viernes, 30 de noviembre de 2007

El misterio de la comillas


Hola asiduos a mi blog, tengo que dar gracias por vuestras visitas y por vuestros comentarios, que me hace un montón de ilusión que los hagáis, de verdad.


(Aunque los hagáis en blogs ajenos)*


Bueno, a lo que vamos. Este es un cartel que hay en un 24 horas llamado Moe's (Sí, como el de los Simpsons) que hay cerca de mi casa. Hace chaflán para más señas. El otro día me quedé mirando el cartel que hay en uno de los cristales donde ponen todo lo que la tienda te ofrece. (Desde chucherías hasta lejía, lo básico para sobrevivir un domingo) Y entoces me di cuenta de unas inquietantes comillas en el cartel. Resulta que tienen pan "recién hecho". No sé a vosotros, pero a mí estas cosas me causan desazón. Ya estaba yo por el camino pensando:


- ¿Cómo que pan "recién hecho"?


Porque no hay nada más entrecomillado. Sólo el "recién hecho". Entonces digo:


- O sea, que no está recién hecho. ¿O sí? Por lo menos es pan, porque el pan no está entrecomillado.


Y eso iba yo pensando de camino a casa de Virgy y Silvia.


Bueno, el caso es que aún está por resolver el misterio. Pero no me da buena espina. Ya se sabe que el pan que venden en las 24 h no es de muy buena calidad. Se hace gomoso y fofo una vez que no está caliente (véase en 5 min). Pero es que encima está "recién hecho". Aisss.


Es que las comillas me inquietan. Es lo mismo que cuando te dicen:


- Sandra, te voy a contar una cosa. "Te vas a reir".


Pues me cuenten lo que me cuenten no suele tener gracia. Más bien al revés. O:


- ¿Qué hiciste ayer?

- "Estudiar" para diciembre. (El entrecomillado en estudiar está encarnado por un gesto con los dedos a modo de comillas y un tono de voz mentiroso).


¡Qué dificil es explicar un gesto con palabras! Bueno, me entendéis.


Pues eso, que las comillas dan mal rollo. Pero ahora prefiero pensar que el que escribió el cartel no sabe usarlas antes que comerme la cabeza como suelo hacer. Y punto.


*(Nadia, creo que has puesto algún comentario para mí en el blog de una amiga. jajaja. No pasa nada, lo he leído. Gracias.)

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Personajes Encantadores I




Bueno, en esta sección os voy a ilustrar sobre ciertos personajes entrañables, de esos que dan ganas de achuchar y de pellizcarles las mejillas. Aquí os contaré todos sus secretos para que os familiaricéis con ellos.

Inaugura la sección:
TOMÁS


Este simpático personaje aparece en El Orfanato. Quienes hayáis visto la película, lo conoceréis y os acordaréis de él. Quienes no la hayáis visto ya os acordaréis de él, ya...

Está un poco muerto y vive junto con otros muchos amiguitos en un orfanato en el que juegan a una versión de "Un, dos tres, Juan, Perico y Andrés". El tío es un bromista y le gusta aparecer en los momentos más inesperados. Lleva un saquito muy mono en la cabeza que le puso su madre Benigna. (Personaje fantástico donde los haya). Esta mujer va a la última siguiendo las tendencias de los años de la postguerra. Las gafas que lleva son lo más. Totally in. Tomás es tan simpático que se hace amigüito de todos los que residen en el orfanato. Incluso les deja el saco que lleva en la cabeza.

Le gusta:

· Visitar cuevas en allá donde Cristo perdió la chancla.

· Los sacos con botones a modo de ojos.

· Beber del cartón de leche.

No le gusta:

· Los pantalones de campana.

· Que Amaia Montero se separe de La Oreja de Van Gogh.

· Que le llamen por teléfono cuando está haciendo la siesta.






martes, 27 de noviembre de 2007

Diálogo profundo

¡Con lo que han sido! Y ahora emborrachádose en cualquier barucho mientras los DVD superplanos se almacenan unos junto a otros y se rien de ellos.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Benvenuti!

Este es mi intento de despejar mi mente de tanta paranoia que alberga. Siempre he considerado que mi cerebro es como el camarote de los Hermanos Marx. Poco espacio para contener lo que contiene. Y no estoy diciendo que sea superinteligente; Dios me salve. Lo que quiero decir es que tengo mucho tiempo libre para pensar tontadas que se van amontonando y amontonado en mi cabeza y cada vez entran más y al final no hay literas para todas. Como primer post creo que esto ya está bien. Y como de Hermanos Marx iba la cosa os dejo una frase de su peli Una noche en la Ópera:

"- Oiga mozo, ¿y no sería más fácil que en lugar de intentar meter mi baúl en el camarote, metiera mi camarote dentro del baúl?"

Cambiad baúl por tontadas, camarote por mi cerebro y a Groucho Marx por una tipa que no le llega a la suela de los zapatos y et voilà! algo parecido a mí debería aparecer. Si no es así llamen al servicio técnico.